SEO (Search Engine Optimization)
Optimización para Motores de Búsqueda.
SEM (Search Engine Marketing)
Marketing para Motores de Búsqueda.
Con un objetivo fin último común como es el de aumentar el tráfico y conseguir más conversiones, estas dos estrategias de marketing digital responden a distintos procesos, tiempos y métricas. A continuación daremos algunas pautas para distinguir entre ambas y poder así elegir cual nos interesa y en qué momento implementar una u otra en orden a nuestros objetivos
Trabajar con estrategias SEO y SEM de distinta forma nos ayudará a mejorar el posicionamiento de nuestra web. Mientras que el SEO nos colocará en los resultados orgánicos, en el centro de la pantalla. Por otro lado estrategías de SEM en como campañas anuncios de Google Ads, pueden situarse tanto encima como debajo de los resultados de búsqueda de Google. Pueden encontrarse a los lados también en Google Play, Google Maps o Google Shopping.
De forma general se suele referir como principal diferencia el coste, con la premisa de que el SEO es gratuito y el SEM es de pago. En cierto modo es así pero actividades de SEO requieren mucho trabajo y tiempo, además de mantenimiento en la web, que podríamos traducirlo en coste pecuniario. El SEM por su parte si que tiene definido su precio y se traducen en las visitas que recibimos. En función de qué tipo de campaña se realice se determinará el coste, y pagaremos en función de los clics que reciba el anuncio.
En lo referente a contenidos estaremos hablando de dos ramas muy distintas tanto en su fondo como en su forma. Para el marketing en motores de búsqueda los anuncios delimitarán la cantidad de carácteres de la que disponemos. Nos exigirá así a ser más impactantes con menos recursos, para cautivar de forma rápida al usuario. Cuando hablamos de optimización en motores de búsqueda, el valor de nuestro contenido lo determinará el tráfico que genere. Se pretende ofrecer una información de calidad que el tráfico orgánico encuentre útil. Se presentan los contenidos de forma más extensa.
Otra diferencia sustancial a tener en cuenta para distinguir en qué momento nos encontramos para implementar prácticas de SEO o de SEM es la temporalidad a la que responden los resultados de una y otra. El SEO obedece a resultados medio/largo placistas, se trata de una carrera de fondo, pero sin embargo es un trabajo basal sobre el que va a sustentarse todo nuestro negocio. En cuanto al marketing de pago, podemos valorar los resultados en corto/medio plazo, de forma que también nos exige a tener una planificación previa para posicionar en función de fechas o eventos concretos. Los resultados del SEM podrán prorrogarse en el tiempo si mantenemos la campaña.
Es esa misma temporalidad la que hace que una rama sea más susceptible de cambio que la otra. Los cambios realizados en campañas de pago se manifiestan en el momento, si corregimos alguna palabra clave que no funciona o algún cambio de forma o contenido, podremos evaluar su respuesta. Mientras que las acciones que realicemos en SEO debe mantenerse más firme, ya que los cambios tardan en hacerse visibles. Dependeremos de que el crawler del motor de búsqueda visite nuestra web y la evalúe.
Las keywords se trabajan de forma distinta y en diferente medida para SEO y SEM. Para esta primera atenderemos a un número límitado de palabras clave para nuestra web, en función de nuestras páginas y contenido. Es interesante potenciar una y sus variaciones por página, de otra forma estás podrían perder relevancia y desvalorizar nuestro trabajo. La naturaleza de nuestra web nos limitará en este aspecto, es por ello que muchos portales habilitan un blog de forma que puedan añadir más contenido, más diverso y de forma periódica, ejerciendo fuerza en las palabras clave en sus posts.
Para SEM funciona de forma distinta. Los sistemas de pujas nos permiten elegir las palabras por cuyo clic pagaremos. La complejidad aquí reside en la amplitud de las palabras, que determinará la calidad del tráfico. En un afán de conseguir conversiones a través de un de tráfico cualificado, podemos caer en un gran número de clics de baja calidad que sólo nos supondrá un coste.
La forma de medir los resultados de nuestras campañas se pueden realizar con distintas herramientas. Para SEO nos apoyaremos en aquellas facilidades que nos ofrecen los motores de búsqueda. En el caso de Google usaríamos Search Console, que es un servicio para webmasters, que de forma gratuita permite comprobar el estado de indexación de una web para el buscador.
En lo referente a la medición de estrategías SEM, las mismas plataformas ofrecen herramientas para medir el estado de las campañas. Google AdWords sería el ejemplo de plataforma publicitaria que ofrece estos servicios. Por otro lado también es recomentable usar Google Analytics que complementará los resultados de esta medición. Sin embargo, esta herramienta que también puede emplearse para mediciones de SEO, encuentra la problemática de la privacidad en las búsquedas que en muchos casos nos impedirá saber porqué palabras clave estamos recibiendo tráfico. Esto es el famoso Not provided.
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