Imagen

La marca representada en imagen

La imagen es un concepto esencial, tanto en nuestro día a día como en las plataformas online.
A través de ella recibimos estímulos, sensaciones, impresiones… todo aquello que podríamos ver y palpar en directo sobre el producto y sobre la empresa, tiene que ser transmitido por la imagen.

No es tarea sencilla construir una imagen que nos represente como empresa. Ésta tiene que estar cuidada y medida al milímetro para que los clientes no duden en contactar con nosotros.
Los colores, la posición de las imágenes, el logo… son ítems que hace falta estudiar y mejorar para conseguir que, nuestra plataforma, destaque entre las demás y consigamos nuestros objetivos.

Si nos fijamos, existen algunas plataformas que usan más colores fuertes como el rojo o el naranja, otras que usan colores más tenues como el azul, y todo ello no es casualidad. La “psicología del color” es un tema relevante e interesante.

Se ha estudiado que, en función del tipo de plataforma que vayamos a desarrollar hay una serie de colores que ayudarán a que ésta prospere. Por este motivo, tenemos que tener muy claro quiénes somos y qué queremos
mostrar y/o conseguir.
Respecto a este tema, se ha estudiado que los diferentes colores provocan emociones en nosotros, que nos llevan a realizar determinadas acciones. Por ejemplo, el color rojo o naranja
en el botón de “compra” comporta que haya más probabilidad de que el cliente le dé clic. Sin embargo, también cabe comprender que una plataforma llena de colores creará el efecto contrario, es decir, que el cliente desconfiará y marchará.
Como pueden apreciar, un tema que parece de poca importancia, genera reacciones en los usuarios, compromete a su actitud y repercute de forma positiva en la plataforma.
En cuanto a las imágenes, hay que tener en cuenta dos máximas: “menos es más” y “calidad antes que cantidad”. Con esto queremos recalcar, en primer lugar, que el número de imágenes tiene que ser limitado; es decir, no hay que recargar la plataforma ya que el cliente recibirá demasiados estímulos que le pueden confundir y rechazar lo que le ofrecemos.
Las imágenes tienen que ser las justas y necesarias, que apoyen al texto, que clarifiquen una idea o un producto, que amenicen la estancia en la plataforma.
Y, por supuesto, tienen que ser de calidad. Imágenes cuidadas, bien trabajadas, elegantes y que transmitan la esencia de la empresa.